Quía, la misma otra de siempre.

“La piel es lo más profundo”.
Paul Valery

“El cuerpo es la parte externa del alma”
William Blake

Quía, es un proyecto experimental multidisciplinario que surge como trabajo final de Edna Orozco en el diplomado de animación experimental de la Universidad Javeriana, para cuya realización obtuvo una beca del Fondo Nacional de Cinematografía. Quía, la misma otra de siempre, es un proyecto de danza contemporanea que trabaja con diversas técnicas experimentales, analógicas y digitales como la animación con luz y el video mapping (donde el video es proyectado sobre el cuerpo mismo de la bailarina , generando un efecto de fantasmagoría tridimensional).
Quía fue presentada por primera vez en junio de 2010 en el Auditorio Paulo VI, de la Universidad Javeriana de Bogotá, con un lleno total y una excelente crítica. Así mismo, el trailer de video, ha generado una increible expectativa en distintas plazas del mundo y comentarios de prensa especializada en arte y nuevas tecnologías de Alemania y Estados unidos.
Es un viaje en una atmósfera de ciencia ficción con el cuerpo humano como vehículo espacial. La proyección parte del interior anatómico, pasando por los imaginarios místicos, sicológicos y simbólicos; en un camino en el que todas las preguntas sobre el cuerpo confluyen y en el que como centro unificador solo encontramos al movimiento y la multiplicidad. Somos uno en tanto somos muchos.
La concepción del cuerpo como un objeto, un recipiente cuya función es la de contener al alma, al espíritu o a la mente (según se vea desde la religión, la filosofía o la ciencia) lleva implícita la idea de el cuerpo como cadáver. La medicina estudia la vida en cuerpos muertos tal como un arqueólogo la re crea a partir del estudio de un cráneo. Sin embargo, cómo explicamos el que “nuestro” cuerpo se transforme constantemente y que no hay en “él” una sola célula que no reaccione a una inhalación de aire, un golpe o un estado de ánimo?.
La animación actuaría entonces como una forma casi literal de este punto de vista, el anima, alma, halo vital que se puede poner o quitar de un cadaver vacío. Mostramos el interior anatómico humano a manera de superficie, para adentrarnos hasta llegar a la piel como “lo más profundo” en una inversión que pone de manifiesto la pregunta por la unidad y la identidad a pesar de la transformación de todas nuestras partículas. Qué es aquello que nos hace ser uno a pesar del movimiento?
El sistema óseo se renueva en su totalidad cada diez años. Sin embargo, tenemos un cuerpo. Si hay algo fijo en nuestras vidas es el movimiento. No habitamos dos veces el mismo cuerpo. Somos los mismos otros de siempre.